miércoles, 15 de junio de 2011

El Frente que encabeza Binner ya tiene nombre: Frente Amplio Progresista


Hermes Binner competirá en las próximas elecciones nacionales con el Frente Amplio Progresista (FAP), tal como fue bautizado ayer el acuerdo de fuerzas políticas que encabeza, cuando falta un día para el vencimiento del plazo para anotar las alianzas electorales.
Hermes Binner competirá en las próximas elecciones nacionales con el Frente Amplio Progresista (FAP), tal como fue bautizado ayer el acuerdo de fuerzas políticas que encabeza, cuando falta un día para el vencimiento del plazo para anotar las alianzas electorales


La elección del nombre, casi una copia del Frente Amplio uruguayo, fue en común acuerdo entre dirigentes del Partido Socialista y el GEN, que encabeza Margarita Stolbizer. Ambas fuerzas tienen personería a nivel nacional


Los demás socios de la coalición de centroizquierda, el Movimiento Proyecto Sur, de Fernando Pino Solanas, y Unidad Popular, de Víctor de Gennaro, integrarán el frente en provincia de Buenos Aires.






Por su parte, la UCR, que lleva a la presidencia a Ricardo Alfonsín, decidió presentarse bajo la denominación de Unión para el Desarrollo Social, luego de que desistiera utilizar la histórica lista 3 por exigencia de sus aliados. El nombre fue elegido en una reunión en la sede del comité nacional.






La referencia a la coalición uruguaya no parece ajena a las referencias políticas de Binner, que siempre elogió la construcción multipartidaria oriental que llegó al poder con Tabaré Vázquez (médico, al igual que el gobernador santafesino), quien fue sucedido por el actual mandatario: José Pepe Mujica.






El diputado nacional del GEN Gerardo Milman confirmó que "ya se reservó el nombre de FAP ante la Justicia electoral", que será anotado hoy tanto para la alianza nacional como bonaerense. Hasta el 25 de junio hay tiempo para definir las listas de candidatos.






En el caso de Binner, su segunda en la fórmula ya está decidido: la senadora nacional por Córdoba Norma Morandini.




Por el armado de las nóminas ya comenzaron los tironeos, y el principal foco de tensión está en Buenos Aires, distrito que llevará a Stolbizer como candidata a gobernadora.


La líder del GEN desayunó ayer junto a sus principales colaboradores en las oficinas de su fuerza en el centro porteño y en ese marco se empezó a dibujar una posible lista para presentar el 25 de junio, sin nombres, pero con las eventuales ubicaciones de los distintos partidos en cada uno de los puestos.


En Buenos Aires, la puja está entre el GEN, Proyecto Sur, el Partido Socialista, Libres del Sur y Unidad Popular. Todos quieren quedarse con un lugar en la nómina y todos ya tienen a sus candidatos y sus pretensiones, aunque por ahora sólo se sabe que De Gennaro será quien encabece la nómina.




Solanas quiere colocar al titular del PSA, Mario Mazzitelli; en el GEN se vence el mandato de Virginia Linares; Libres del Sur quiere que Victoria Donda renueve su banca; al igual que el socialismo, que busca lo mismo para Ricardo Cuccovillo.


Según estiman en el FAP, este año podrían lograr entre seis y siete bancas si es que Stolbizer se mantiene cerca de los 20 puntos que consiguió en las elecciones de 2007.




Fuente: LaCapital.com.ar

sábado, 11 de junio de 2011

Binner fue proclamado candidato y Morandini será su compañera de fórmula


El flamante candidato a presidente por el socialismo dijo que la conformación del espacio que él encabeza -y que aún no tiene nombre- "es una verdadera oportunidad y necesidad" frente a la situación que atraviesan "los grandes partidos", que "se están resquebrajando como gigantes de barro". El Partido Socialista consagró formalmente la postulación de Binner y a la senadora Norma Morandini como su compañera de fórmula. Por su parte, Margarita Stolbizer, titular del GEN e impulsora de Morandini, confirmó que será aspirante a la gobernación bonaerense.
“Por qué Norma Morandini. Porque es una compañera que se ha destacado en el orden de la vida no solamente como escritora y periodista sino como una persona con profundas raíces humanas”, definió Binner.
El gobernador de Santa Fe también tuvo un apartado de ironías para sus ex socios radicales al decir que “vamos a encontrarle una razón de ser a este espacio, que todavía no tiene nombre, pero que seguramente será 'progresista'”. Y lanzó un tiro por elevación también al diputado Francisco de Narváez: “Progresismo no es lo que escuché el otro día por ahí, 'que la gente progrese', sino que es un acto colectivo, no individual”, definió Binner.
El mandatario santafesino ingresó al auditorio acompañado por la flamante candidata a vicepresidenta y senadora nacional por Córdoba, junto al líder de Proyecto Sur, Fernando `Pino´Solanas; el gremialista Víctor De Gennaro; la diputada nacional Victoria Donda (Libres del Sur), y Stolbizer, entre otros dirigentes de las fuerzas que integran la alianza con el socialismo de cara a los comicios de octubre.
Ante congresales y militantes del partido socialista, Binner se comprometió, junto con su compañera de fórmula a que Fernando Pino Solanas, Margarita Stolbizer, Luis Juez y Antonio Bonfatti "ganen las elecciones" en Capital Federal, provincia de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, respectivamente.
“Haré mi aporte en la provincia”, ratificó Stolbizer, quien estimó que su decisión “cambia totalmente el escenario político” de octubre.
Por su parte, Pino Solanas se manifestó “contento” por la elección de Morandini, a pesar de que la candidata que Proyecto Sur recomendó a Binner fue la legisladora porteña y socióloga Alcira Argumedo. No obstante, “esto no va en desmedro de Morandini”, aclaró.
“Hoy al mediodía hablé con Hermes y me dijo 'mirá, estoy priorizando el armado del interior a la fuerza de Buenos Aires'”, reveló el candidato a jefe de gobierno porteño de Proyecto Sur, para explicar la estrategia del frente para las elecciones presidenciales de octubre.

Razones de la candidatura de Binner

Julio Burdman

Algunos se mostraron sorprendidos por los movimientos que viene realizando Hermes Binner hacia una candidatura por un frente que agrupe a los partidos de centroizquierda opositora. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el análisis político que realiza este sector no mira solamente las encuestas y la coyuntura de 2011. Se trata, más bien, de una apuesta hacia la consolidación de un nuevo espacio nacional en un mapa partidario en transformación.
Los partidos de centroizquierda enfrentan una oportunidad electoral histórica, inédita. Siempre sufrieron el problema de la falta de implantación territorial. El progresismo fue un fenómeno metropolitano. Hoy, en cambio, cuenta con presencia real en los principales distritos del país. Partido Socialista santafesino, Partido Nuevo cordobés, Proyecto Sur porteño y GEN bonaerense, más el Nuevo Espacio Entrerriano y desprendimientos afines en San Juan, Mendoza y otras provincias, hoy compiten seriamente por gobernaciones e intendencias importantes. A la inversa de la experiencia frepasista, construida a partir de liderazgos porteños mediáticos que aspiraban la presidencia. Es la primera vez en la historia democrática reciente que una fuerza progresista tiene condiciones reales de establecerse como alternativa al bipartidismo en el país federal.
En particular, este espacio tiene altas probabilidades de que sus candidatos a gobernador de Córdoba y Santa Fe, Luis Juez y Antonio Bonfatti, se impongan en las elecciones de julio y agosto. Ambas provincias concentran el 20% de la población, una proporción aún mayor del PBI nacional, y tienen una agenda económica propia. Una región centroprogresista constituiría un polo verdaderamente interesante para debatir la matriz bonaerense y centralista de la Argentina a partir de la reforma constitucional de 1994, y construir una nueva identidad política.
Este espacio de centroizquierda que está surgiendo en Argentina, desde las provincias hacia la Nación, necesita una propuesta presidencial para crecer. La candidatura de Binner, quien cuenta con el cursus honorum de su experiencia de gestión, es necesaria para ello: además de competir en la carrera presidencial, apuntalaría a los candidatos a gobernadores, intendentes y legisladores nacionales. Como en tres de los cuatro distritos principales las elecciones provinciales están desdobladas (CABA, Santa Fe y Córdoba), sin una oferta presidencial el incipiente espacio progresista tiene pocas chances de formar un bloque legislativo fuerte para el período 2011-2015.
Todo lo anterior, asimismo, debe ser entendido en el siguiente contexto: mientras que los partidos de centroizquierda tienen excelentes razones para querer lanzarse solos al plano nacional, la alternativa de reeditar el Acuerdo Cívico y Social de 2009 con el radicalismo es poco atractiva en más de un sentido. Aunque más de la mitad de los votos del ACyS correspondió a los aliados de la UCR –la centroizquierda y la Coalición Cívica–, el partido centenario está empecinado en liderar la oposición. Tienen un candidato con potencial electoral –Ricardo Alfonsín– pero vienen de pobres rendimientos en las elecciones provinciales y no tienen triunfos a la vista ni candidatos fuertes en los distritos. La familia panradical carece de liderazgo y coordinación. Una de las fortalezas de Alfonsín es su presencia mediática, pero ésta algo puede cambiar una vez que Binner logre instalarse –pese a que su sector apoyó en general la Ley de Medios.
La alianza con Francisco de Narváez sin dudas ofrece a Alfonsín una plataforma interesante para la provincia de Buenos Aires, pero la agenda del incipiente Frente Progresista apunta a otra dirección ideológica y también geográfica. Algunos votantes y dirigentes radicales, confía Binner, terminarán apoyando a su coalición si Alfonsín profundiza su alianza con sectores del peronismo federal. Ello, junto al aporte que puede recibir de los partidos progresistas en los cuatro distritos principales que representan el 70% de los votos, agrega razones a una decisión con horizonte de mediano plazo.
*Analista político.

Perfil.com

viernes, 27 de mayo de 2011

En la centro-izquierda se pelean por el vice de Binner

La posible candidatura de Hermes Binner a la presidencia con sectores de la centroizquierda y sin el radicalismo generó contrapuntos en torno a su eventual compañero de fórmula.

Pino Solanas impulsa a la diputada nacional Alcira Argumedo , y los cinco espacios nucleados en Proyecto Sur apoyaron esa intención en un comunicado que generó el rechazo de otros sectores, como Libres del Sur, que apoyan al sindicalista Víctor De Gennaro para ese lugar.



“Haciendo suya la propuesta del compañero Pino Solanas, las fuerzas que integran el Movimiento Proyecto Sur apoyan a Argumedo como candidata a la fórmula presidencial”, avanzó el texto firmado por Luis Brunatti y avalado por Proyecto Sur, PSA, MST, PCR y la agrupación Humanismo y Liberación. “Libres del Sur no ha sido parte de esa decisión y no avala la candidatura de Argumedo”, replicó Humberto Tumini, líder de esa fuerza, una de las impulsoras de De Gennaro: “En caso de que Binner sea candidato a presidente de un frente amplio, el compañero de fórmula debe ser De Gennaro y, si Binner no quiere serlo, para nosotros el mejor candidato es De Gennaro”.



También expresó reparos Eduardo Macaluse, de Solidaridad e Igualdad . “Acordamos que la integración de la fórmula la definiríamos entre todos y que el candidato a presidente tenía preeminencia en la designación del vice. No veo motivo para variar ese criterio, más allá del respeto que tenemos por Alcira”, aseguró.



De Gennaro se reunió con Binner el viernes, antes de las primarias de Santa Fe, y en esa charla evaluaron la posibilidad de una fórmula en conjunto. Con el triunfo de Antonio Bonfatti, delfín del gobernador de Santa Fe, y los cortocircuitos entre el socialismo y los radicales, las especulaciones sobre ese armado comenzaron a tomar fuerza. En ese contexto Solanas apuró la propuesta de Argumedo, que generó resistencias.



Fuente: Clarín

martes, 24 de mayo de 2011

Binner se lanza como candidato a presidente


Admitió su intención de liderar el Frente Progresista y condicionó el acuerdo con el radicalismo



ROSARIO.- Con un resultado muy favorable bajo el brazo en las elecciones primarias de Santa Fe , el gobernador socialista Hermes Binner comenzó a dar fuertes señales con vistas a loscomicios de octubre: convocó a la construcción de un frente progresista a nivel nacional y, por primera vez, reconoció que tiene ganas de ser candidato a presidente, aunque supeditó esa posibilidad a un consenso entre todas las fuerzas.
Fiel a su estilo moderado, el mandatario provincial priorizó la discusión de los "programas" por sobre los nombres. Pero en diálogo con LA NACION avanzó un poco más en su estrategia política y destacó: "Hay que pegar un salto lo más largo que se pueda. Si se dan las condiciones, por qué no", se preguntó cuando fue consultado si le gustaría ser candidato a presidente en octubre. Aclaró que para ello hace falta un acuerdo amplio, en el que incluyó a la UCR, aunque objetó la incorporación de Francisco de Narváez a un acuerdo electoral. Después de haber asegurado el triunfo de su candidato, Antonio Bonfatti, Binner retomará las delicadas negociaciones con el radicalismo, liderado por el precandidato presidencial Raúl Alfonsín, que presiona para que sea el vice en su fórmula, y otro polo de fuerzas de centroizquierda, algunas refractarias a la UCR. En ese grupo, se inscriben Proyecto Sur, GEN y los sectores del cordobés Luis Juez y Víctor De Gennaro.
Durante un diálogo con LA NACION y con otros medios tomó mate cocido, defendió su gestión y pidió exportar el modelo santafecino a la Nación.
-¿Es viable que se replique el Frente Progresista de Santa Fe a nivel nacional?
-Nosotros aspiramos a lograr un frente a nivel nacional de características similares.
-¿Lo incluye a Alfonsín?
-Sí, claro.
-¿Empezando por el radicalismo o es una opción más?
-No, no. Acá empezamos con el radicalismo, después se fueron adhiriendo otros partidos.
-De Gennaro aseguró que si está el radicalismo dentro del frente, no va acompañar. Lo mismo dijo Proyecto Sur.
-Acá la gente de la línea de pensamiento de De Gennaro está dentro del Frente. Es el Pares, donde el candidato a senador de la Capital, Toni Riestra, tuvo muy buena elección.
-¿Qué hará el socialismo si es incompatible la alianza entre la UCR y las otras fuerzas?
-Acá estamos trabajando todos juntos. Los integrantes de la Unión Cívica Radical de Santa Fe no son diferentes de los de otra provincia. ¿Dónde está el problema?
-El obstáculo que aparece a primera vista es De Narváez.
-No creemos que debe estar en un frente nacional.
-¿Ni siquiera admite un acuerdo distrital?
-Margarita [Stolbizer] ya se expresó y el Partido Socialista de la provincia de Buenos Aires también. Me parece que es un capítulo cerrado. Dentro de una coalición, donde es necesario ponernos de acuerdo sobre temas fundantes, probablemente no vamos a estar de acuerdo en el cómo por más definiciones que tengamos. No es todo igual. No es que el frente abre las puertas y el que quiera entrar, entra. Es un límite para una coalición [por De Narváez]. Que quede claro.
-La UCR espera que usted acepte ser vice. ¿Cuál es su postura?
-No estamos hablando de eso. Vamos por paso. También es cierto que puede ser que no haya acuerdo.
-Y, en ese caso hipotético, ¿qué escenario ve como probable?
-Hay otra gente que tiene ganas de tener acuerdos. Ya es una cuestión de la Unión Cívica Radical y no nuestra.
-¿El Frente que pretende impulsar cree que tiene chances de ganar en estas elecciones o es un armado en 2015?
-Las dos cosas. Nos interesa hacer algo en forma continua.
-Pero ¿está pensando en las elecciones de octubre?
-Claro que sí. Hay que pegar un salto lo más largo que se pueda.
-¿Pueden ganar?
-Depende de lo que se arme. Con el socialismo solo, le digo que no.
-¿Tiene ganas de ser candidato a presidente?
-Por supuesto. Pero no solo. Hace falta construir con mucha gente y podemos acompañar. Pero tampoco me quita el sueño. La mayor parte de mi vida no fui ni gobernador ni intendente.
-¿Se ve compitiendo en octubre?
-Por supuesto. Si se dan las condiciones, por qué no. Si no, para hacerlo peor de lo que están haciendo ahora, que sigan los que están. Para hacerlo como lo hizo la Alianza, que lo haga la alianza. Si no tenemos un tronco de ideas comunes en las cuales nos pongamos de acuerdo en 40 o 50 por ciento para una tarea que hay que hacerla en 20 años, no tenemos salida.

Fuente: La Nación

martes, 27 de julio de 2010

Instan a Binner a meterse en la pelea


Margarita Stolbizer, líder del GEN, fue ayer en peregrinaje a Santa Fe para tratar de convencer al gobernador socialista Hermes Binner que asuma el liderazgo del sector progresista del Acuerdo Cívico y Social.

Fue una nueva señal de distanciamiento de su ex aliada, Elisa Carrió, jefa de la Coalición Cívica, a quien volvió a reprocharle las crítiicas que le dirigió a Ricardo Alfonsín, presidenciable de la UCR, el otro componente del Acuerdo Cívico.

Binner recibió a Stolbizer en su despacho y escuchó de la diputada nacional la propuesta de “lanzarlo al plano nacional para ejercer el liderazgo de los sectores progresistas”. Según la jefa del GEN y sus acompañantes, los diputados Gerardo Milman, Horacio Alcuaz y Fabián Peralta, el gobernador se limitó a “tomar nota y no tuvimos respuesta”.

Antes de ingresar a la Casa Gris, Stolbizer sostuvo que “nuestro frente tiene muchas personas y cada uno deberá trabajar para el mismo lado. Hay que acelerar los tiempos electorales pero yo todavía no veo constituído el Frente. Es urgente definir un programa de gobierno nacional. Con esta demora gana el kirchnerismo”.

La recorrida comenzó en Rosario, donde la comitiva del GEN se reunió con autoridades del PS, pero sin su titular, Rubén Giustiniani, que se quedó en Buenos Aires. Y cerró anoche con el intendente radical de Santa Fe, Mario Barletta, antes quien manifestaron que el Acuerdo Cívico “necesita alcanzar una lista única con vistas a los comicios presidenciales”. El ARI local aprovechó para recriminarle a Stolbizer sus ataques a Carrió.

domingo, 18 de julio de 2010


Binner dijo que en 2011 estará en la pelea nacional
Jorge Sansó de la Madrid / La Capital


Presidente o vicepresidente de la Nación, el gobernador Hermes Binner confirmó a este diario que estará "en un espacio nacional desde 2011" en relación a alguna de las fórmulas que busquen suceder a Cristina Fernández y Julio Cobos. Por eso dice que le firma un compromiso al peronismo de que no buscará una reelección aunque no cree que éstos lo dejen reformar la Constitución provincial —por lo que, piensa, pagarán un costo político— pese a que insistirá en enviar el proyecto otra vez a la Legislatura. Asimismo ratificó de modo igualmente taxativo que su delfín para sucederlo en la provincia es su ministro de Gobierno, Antonio Bonfatti: "Estamos trabajando en ese camino, sí".

—¿La oposición le hizo la vida imposible o fue más contemplativa de lo que esperaba?

—Esperábamos una mayor integración con el justicialismo que no se pudo dar. Hay temas que tomaron como banderas muy duras.

—Tal el caso...

—Ingresos brutos a la industria y construcción. Tributo que se cobra en Córdoba, Entre Ríos, Buenos Aires, y genera una dificultad hacia la concreción de la Región Centro porque si no hay isonomía tributaria no hay posibilidad de conseguir los resultados buscados en el proceso de integración regional con esas provincias.

—¿Me dirá que se lleva de maravillas si le pregunto por su relación con la Intendencia de Rosario?

—Hace lo que tiene que hacer. Hay una división muy clara. En cuanto al Parque Federal, la provincia hace la obra y después se la entregamos al municipio.



    —Eso en Santa Fe, yo le pregunté por Rosario.—Es lo mismo. Vamos a intervenir en una serie de galpones de la Costa y después se lo entregamos al municipio.

   

    —Los intendentes de Rosario y Santa Fe, aspiran a sucederlo, ¿cómo incide eso en la relación?—No incide. Y son legítimas las aspiraciones de uno y otro.

   

    —Cuando Barletta insiste en institucionalizar el Frente Progresista...—Tiene razón, yo también quiero lo mismo. Y tenemos experiencia en hacerlo porque el Frepaso en la única provincia en que se institucionalizó fue en Santa Fe.

   

    —Pero en el reclamo de los radicales hay un reproche al socialismo para tener espacios de gobierno que, aseguran, se les retaceó en su gestión.—Acá hay igual cantidad de radicales y socialistas en el gabinete; y mucha gente que no es ni radical ni socialista y participa activamente.

   

    —Los radicales quieren que su sucesor sea radical, ¿le llegó el mensaje?—Eso me parece débil. Este no es un problema de repartir cargos, si no, volvemos a la vieja política. Lo que el Frente debe elegir son los mejores partícipes de esta gestión que comprendan cuál es el camino a seguir. De lo contrario, volvemos otra vez a primer grado y si alguien no está compenetrado con el plan estratégico y no se visualiza todo lo que se avanzó, puede ser válido como propuesta pero quita la continuidad que fue, por ejemplo, el gran éxito del plan en Rosario.

   

    —¿O sea que (Antonio) Bonfatti, por ser ministro de este gobierno, está en mejores de condiciones de dar ese reaseguro de continuidad que Barletta o Lifschitz?—Obviamente. (El) está, nosotros tenemos reuniones y ya vamos por la reunión de gabinete número 135. De manera que estamos trabajando en ese camino, sí.

   

    —También está Giustiniani que tampoco califica en cuanto al garantía de presencia constante en su gestión.—Pero esa apreciación no excluye a nadie.

   

    —Todos dan por hecho que usted integrará una formula nacional el año que viene.—Sí, pero nosotros no queremos sacar el entusiasmo ni la fuerza a lo que estamos haciendo.

   

    —¿Qué tiene de malo que diga que le interesa ser presidente o vice de la Nación?—Eso lo digo. Me interesa estar en un espacio nacional desde el 2011.

   

    —Entonces, ¿se ha pensado presidente de la Nación?—No, lo he pensado como espacio en el que uno puede aportar desde la experiencia.

   

    —No faltará quien interprete que deja abierta la puerta para completar una fórmula como vice.—Me preocupa más que el hecho de participar en un ámbito nacional no me convierta en un defensor del antifederalismo, como pasa con frecuencia que de cualquier provincia llegan a Buenos Aires como federales y se convierten en porteños.

   

    —Como sea, a fin del 2011 se ve en Buenos Aires.—Lo importante es que estamos desmintiendo el paradigma por el que una gestión tiene dos años para crecer y los otros dos de declive. Nosotros pasamos los dos años y seguimos creciendo, haciendo escuelas, hospitales y vamos a lograr que esto continúe, aunque hay obras que no se pueden hacer sólo en cuatro años.

   

    —¿Es consciente que para que lo voten deberá mostrar una cuantas paredes levantadas?—No se preocupen, se están levantando.

   

    —La oposición le enrostra que usted sólo muestra enunciados.—Para nosotros el proceso tiene una vinculación muy grande con el programa que llevamos adelante. No hacemos obras para la elección que sigue, sino para cubrir las necesidades de la población. Esto es comprobable en un tema delicado como es la moralidad infantil que por segundo año consecutivo venimos disminuyendo por encima de la media nacional. Esto habla a las claras de que el plan está funcionando.

   

    —¿Piensa que el PJ no le habilita la reforma constitucional porque teme que usted se tiente con una reelección?—No. Eso está lejos de toda posibilidad. Eticamente corresponde así. La ley con la que asumí me dio cuatro años sin reelección y eso debo acatar, sino es violar la ley.

   

    —Otros lo han hecho.—Pero está mal. Creemos que hemos avanzado en forma importante en la compresión de muchos fenómenos sociales, económicos y políticos que hacen a la necesidad de reformar la Constitución con más integración entre lo público y privado, una mayor institucionalidad y un sentido de progreso hacia una sociedad más equitativa.

   

    —¿Cree que la reforma será posible este año?—Creemos que es posible por eso la seguimos planteando. Nuestra Constitución no sólo debe ser modernizada sino que hoy es inconstitucional. No puedo seguir negándome a permitir que la sociedad tenga una herramienta de avance. Si lo que los peronistas quieren es mi negativa a la reelección les firmo un documento público asumiendo el compromiso de no violar la Constitución provincial de 1962.

   

    —Usted apoyó el matrimonio homosexual de entrada, ¿intuía que se aprobaba la ley?—En realidad, pensé que no se iba a aprobar. Felizmente se aprobó. Es una realidad y eso no debe desconocer. Incluir es parte del proceso de gobernar.